“La Ribera, nos espera”, un espacio para el cambio
08/2022 - Asturias
La voluntad es esencial a la hora de emprender un viaje… Tener la mente abierta a nuevas experiencias y formas de hacer, nos ayuda a llegar allá donde queramos. Esto lo saben bien las personas participantes del campo de trabajo organizado por Fundación Adsis en Asturias “La Ribera nos espera”, en su vigésimo primera edición. 18 personas en situación de privación de libertad que durante cinco días han realizado actividades para favorecer su desarrollo personal, un estilo de vida saludable, y su inserción social.
Se trata de 18 de las personas internas en la Unidad Terapéutica y Educativa (UTE) del Centro Penitenciario de Asturias. Un módulo en el que conviven 220 personas que comparten el objetivo de trabajar activamente en su proceso de cambio para conseguir una reinserción social y laboral satisfactoria al salir de prisión.
Cinco días para experimentar, reflexionar y trabajar en equipo
El campo de trabajo “La Ribera, nos espera”, celebrado del 4 al 8 de julio, combinó actividades experienciales con talleres de reflexión personal y de diálogo en grupo que permitieron a los y las participantes tomar conciencia del momento personal en el que se encuentran, de sus necesidades y de los retos de crecimiento y compromiso que tienen por delante. “No se trata de una experiencia para pasar el rato, si no que se busca crear espacios en los que crecer personalmente y afianzar esos compromisos que le hacen bien a cada persona”, comenta Javier Illarramendi, psicólogo de Fundación Adsis en Asturias.
Debido a los protocolos estrictos de prevención ante la Covid19 que aún se siguen en el centro penitenciario, este año la actividad se celebró íntegramente dentro del recinto, eso sí, con una gran alegría por retomarla tras dos años de parón. Se realizaron dinámicas y talleres variados en torno a diferentes temáticas: proyecto personal, relaciones, trabajo, bienestar, ocio y tiempo libre, solidaridad y autocuidado, además de actividades de ocio y cultura.
Un equipo de 6 profesionales y 9 personas voluntarias de Fundación Adsis fue el encargado de dinamizar y compartir las actividades con los y las participantes. Un trabajo hecho en coordinación con el equipo multidisciplinar de la UTE y con el ayuntamiento de La Ribera de Arriba, un pueblo que lleva implicado en el proyecto desde el año 2012, y que juega un papel esencial acogiendo e integrando a sus participantes.
Reflexiones, aprendizajes y apoyo
Este acogimiento por parte de la Ribera de Arriba, así como de las instituciones asturianas, se demostró el día de la clausura. Y es que para cerrar la experiencia, las personas participantes compartieron un acto con representantes de la Consejería de Salud del Principado de Asturias, entre las que estaba la Directora General de Salud Pública, Lidia Clara Rodríguez, representantes del ayuntamiento, entre los que se encontraba el alcalde, Tomás Manuel Fernández y miembros de la dirección del Centro Penitenciario de Asturias, entre las que estaba su directora, Nieves Martínez.
El acto fue una gran oportunidad para que los representantes públicos pudieran conocer de primera mano la realidad y las necesidades de las personas que se encuentran en situación de privación de libertad, así como conocer el proyecto de la UTE. Las y los participantes de “La Ribera, nos espera”, aprovecharon, además, para exponer sus conclusiones y aprendizajes hechos durante los últimos días. Estas fueron sus palabras:
“Hola a todos y todas aquí presentes. En primer lugar y, antes de nada, nos gustaría agradeceros a cada uno de vosotros y vosotras, profesionales y voluntariado de la Fundación Adsis, el haber apostado por darnos la oportunidad de vivir esta gran experiencia. Nos habéis acompañado con un gran esfuerzo, actitudes encomiables y cualidades indescriptibles, creando un ambiente mágico, que ha propiciado que cada uno de nosotros y nosotras diera su mejor versión, además de una manera fácil y natural y todo ello gracias a vuestras grandes cualidades, valores y vuestro gran hacer… Gracias a todos vosotros y vosotras tenemos la oportunidad de perdonarnos errores, compartir y lidiar con nuestros miedos, inseguridades y carencias. Nos sentimos más ricos que ayer pues nos habéis enseñado a valorar y aprovechar nuestro tiempo e incluso a mejorar su calidad. Somos conscientes de que la aventura, que es la vida, no va a ser fácil, pero nos habéis dado herramientas para afrontar las dificultades con esperanza, ilusión, fuerzas y con una gran sonrisa. Gracias por vuestra gran labor, más que necesaria y por habernos hecho sentir parte de ello”.
